La conselleira de Política Social e Xuventude, Fabiola García, anunció que la Xunta de Galicia destinará 100 millones de euros al año para ayudar a todas las personas dependientes que son cuidadas en sus hogares. Así lo señaló esta mañana en una visita a la vivienda de una persona con dependencia en Mos que es atendida por su hija, y en la que estuvo acompañada de la alcaldesa Clara Arévalo.

García apuntó que 20.000 familias gallegas se beneficiarán del Bono cuidado universal, una ayuda de 5.000 euros al año para todas las personas con dependencia que reciben atención en sus domicilios, ya sea por un familiar, un vecino o cualquier otra persona. Al respeto, apuntó que con este bono Galicia es la primera comunidad en emprender el camino hacia universalización de los cuidados, puesto que se trata de una ayuda que llegará a todos los dependientes, con independencia de su grado o situación económica.

Asimismo, la conselleira destacó que los presupuestos de la Xunta para el próximo año 2024 avanzan en la dirección de situar a Galicia en el liderazgo de la atención a la dependencia y de las políticas sociales. En este sentido, destacó que, un año más, el Ejecutivo autonómico refuerza el gasto social, que superará los 9.700 millones de euros y que será el más alto de la historia.

García se refirió a otros programas que tiene en marcha la Xunta para atender a la preferencia mayoritaria que tienen las personas mayores de poder vivir esta etapa de sus vidas en su entorno familiar. Con este objetivo, el Ejecutivo autonómico incrementa cada año el Servizo de Axuda no Fogar (SAF), que atiende a 26.000 gallegos en sus casas y al que se destinan 112 millones de euros; y puso en marcha el programa Xantar na Casa, que lleva 14.000 menús semanales a las viviendas de 2.000 gallegos que viven solos.

En esta misma línea, se reforzó y se mejoró el servicio de Teleasistencia, que permite poner la tecnología al servicio de las personas mayores y que beneficia en la actualidad a más de 9.000 personas; y se fomentaron los cuidados en el entorno familiar, para ayudar al cuidador habitual en sus tareas.